El Rocasa Gran Canaria, tras su notable triunfo en competición europea, se enfrenta este miércoles ante el Elda Prestigio (19:00 hora canaria) en la Copa de SM La Reina en tierras valencianas. Las grancanarias deberán superar esta eliminatoria para estar en la fase de final en San Sebastián con los ocho mejores equipos del torneo.
Con apenas cuatro días de descanso tras el último partido, el Rocasa Gran Canaria afronta este miércoles un nuevo desafío en su complicada cuesta de enero. Partido clave para las teldenses, por cuanto una derrota las dejaría fuera de la fase final del torneo y sin opciones de alcanzar uno de los tres títulos en los que se encuentra inmerso esta temporada.
El Rocasa Gran Canaria tendrá que superar varios obstáculos si quiere superar esta eliminatoria. El primero, y el más importante, su rival. Un equipo de Liga Guerreras Iberdrola, que se muestra especialmente fuerte en su pista. Las valencianas han resuelto sus dos últimos encuentros en el Florentino Ibañez con victoria, amén de muy buenas actuaciones sin premio a lo largo de la temporada.
La buena noticia para el Rocasa es que ya conoce lo que es ganar en esa cancha esta temporada, allá por octubre, en la que fue la primera victoria del curso para las grancanarias en la presente edición de la Liga Guerreras Iberdrola. Entonces, un equipo condicionado por el errático inicio liguero y acuciado por la falta de victorias, supo imponerse con justicia a su rival (20-26).
Pero no será el único enemigo de las grancanarias. La falta de tiempo para preparar este partido y el cansancio lógico por la cercanía del último encuentro se presenta como otro contratiempo que dificulta el objetivo. Por fortuna, la superioridad exhibida por el Rocasa ante su rival en competición europea permitió a Iñaki Ániz rotar a sus jugadoras y dar descanso a las más habituales.
Por el contrario, el Elda Prestigio sí ha podido contar con un margen de tiempo más amplio para preparar este compromiso, ya que su último partido -victoria en Liga- lo disputó el 13 de enero. Es decir, el conjunto valenciano dispondrá de once días para preparar esta eliminatoria. Tocará superar el factor físico para alcanzar la ronda final.
Con todo, el Rocasa también tiene motivos para el optimismo. La contundente victoria en Europa ha sanado muchas heridas. El equipo vuelve a sonreír tras varios partidos sin hacerlo, y ha recobrado moral para afrontar los meses decisivos de la temporada. El equipo, a pesar de sus irregulares resultados a lo largo del curso, sigue vivo en las tres competiciones y sus aspiraciones siguen intactas en todas ellas.
En caso de superar la eliminatoria, el Rocasa accedería a la fase final del torneo para la que ya están clasificados el Super Amara Bera Bera (como organizador), KH7 Granollers (finalista de la edición anterior), Balonmano Porriño, Atlético Guardés, Costa del Sol. Faltaría por conocer el otro integrante del cuadro de ocho, que saldrá de la penúltima eliminatoria, que se disputa este martes entre Lobas Oviedo y Atticgo Elche -las ilicitanas, en idéntica situación que el Rocasa- en tierras asturianas.